Muchas de nuestras bebidas favoritas no están completas sin un ingrediente particular: el hielo.

Este pequeño elemento que podemos encontrar en distintas formas como cubitos, esferas, medias lunas, entre otros, es más importante de lo que muchos piensan y por eso hoy dedicamos un artículo a los equipos que lo elaboran.

Las fábricas o máquinas de hielo nos permiten ahorrar tiempo. Además, nos ayudan a asegurar la calidad y el abasto de hielo para cubrir la demanda de todos los días, ¿pero cómo funcionan?

Aunque la forma varía dependiendo del fabricante o el modelo, todas funcionan de forma similar. Podemos considerarlas de forma práctica como equipos de refrigeración que tienen una gran potencia. 

El funcionamiento

Su mecanismo es sencillo y consta de pocos pasos, te lo detallamos a continuación:

1. La máquina cuenta con un sistema de tuberías y mangueras por las que pasa el agua hasta llegar a unas bandejas que darán la forma al hielo.
2. Al llegar el líquido a las bandejas, éste se va congelando por capas, poco a poco pero a gran velocidad hasta formar los cubitos.
3. Cuando el hielo está formado y completamente congelado, se desprende gracias a que la bandeja aumenta su temperatura. En ese momento escucharemos cómo caen los hielos al espacio de almacenamiento.
4. Cuando el almacén de hielo ya no tiene capacidad para más cubitos, la máquina detiene la fabricación hasta que éste vuelva a tener espacio de nuevo. 

¿Cuánto tarda todo este proceso?

Pues bien, esto depende de factores como la potencia de la máquina, la forma que tendrán los hielos, el lugar donde esté ubicado el equipo, entre muchos otros. Por lo general se comienzan a formar las capas de hielo a partir de los primeros 60 segundos de funcionamiento y el proceso final puede tardar hasta 24 horas para conseguir la congelación correcta.

¿Qué hacer para que funcione correctamente?

Aquí te compartimos algunos tips para lograr el mejor rendimiento y funcionamiento de una máquina de hielo.

1. Si alimentamos la máquina con agua fría, el proceso de fabricación del hielo será más corto, aunado a que el equipo trabajará con un menor esfuerzo.
2. Coloca tu máquina de hielo lejos de cualquier fuente de calor, como los hornos. Entre más fresco sea el ambiente en el que se encuentra, mejor será el desempeño. 
3. ¡No olvides el mantenimiento! Esto es fundamental para que aproveches al máximo tu equipo y tenga una larga vida útil de óptimo funcionamiento.

En Cimenet contamos con una amplia variedad de máquinas de hielo y equipos de refrigeración para cualquier tipo de establecimiento, como restaurantes u hoteles.

Acércate a nosotros y resuelve todas todas las dudas que tengas sobre estos magníficos equipos. ¡Contactanos!